jueves, 28 de agosto de 2014

Salmón con Salsa Balsámica de Romero



Aunque por el color oscuro de la salsa de vinagre balsámico, este plato pueda no resultar muy atractivo a la vista, os puedo asegurar que ésta es una de las mejores recetas de salmón que he probado hasta el momento. El sabor de la salsa combina a la perfección con el salmón y el punto aromático del romero fresco le da un toque maravilloso. Seguro que no dejarás que sobre nada :-)

Esta es una de esas recetas fáciles de salmón, que no llevan mucho tiempo y que te sorprenden por el resultado tan delicioso que tienen. Es perfecto como segundo plato de una comida o como plato único en una cena acompañado de una ensalada. También es perfecto para un día especial con invitados. Seguro que los sorprenderás :-)


Sobre los ingredientes...


El salmón tiene muy buenas propiedades que lo hacen muy saludable. ¿Sabías que contiene ácidos grasos Omega-3 que contribuyen a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre? Además, igual que el resto de los pescados, el salmón contiene proteínas de alto valor biológico. Por todo esto, es recomendable incluir el salmón en la dieta.


Romero Fresco
Para hacer la salsa para el salmón se utiliza vinagre balsámico de Módena, vino blanco, miel, mostaza de Dijon, romero fresco picado y ajo machacado.

El romero es una planta aromática que se lleva usando en la cocina desde tiempos inmemoriales acompañando sobre todo asados de carnes pero también pescados y vegetales. También se usa para aromatizar aceites incorporando una ramita fresca en el envase donde se conservan. En Castilla-La Mancha es habitual encontrarlo cubriendo quesos curados (Queso Manchego al Romero).

El vinagre balsámico o aceto balsámico es un vinagre de origen italiano, concretamente de la ciudad de Módena. Destaca por su sabor fuerte, ligeramente dulce y su color oscuro. El vinagre hecho de la forma tradicional requiere una maduración de al menos 12 años. Sin embargo, las versiones industriales reducen muchísimo este tiempo para reducir el coste. Es muy fácil encontrarlo en los supermercados.


Sobre la forma de preparar el salmón...


Es muy fácil de preparar y podrás tenerlo listo en media hora.

La salsa se prepara poniendo todos los ingredientes en un cazo, se lleva a ebullición y se cuece a fuego lento hasta que espesa. Después sólo hay que cocinar el salmón en una sartén o a la plancha y servirlo regado con la salsa.

Lo mejor es cocinar los trozos de salmón de dos en dos o incluso de uno en uno si la sartén no es muy grande. Debe hacerse a fuego medio alto. El salmón debe quedar tostado por fuera, pero jugoso por dentro. Si el fuego no fuera lo suficientemente alto, para conseguir que se dore en el exterior, podría quedar seco en el interior.

Para evitar que los primeros filetes de salmón que has cocinado se enfríen mientras se cocinan los demás puedes meterlos dentro del horno, con el horno templado (no caliente, pues se secarían). Puedes precalentarlo a unos 50 grados, si tu horno lo permite. Otra opción es usar dos sartenes grandes al mismo tiempo.

También es posible cocinarlo al horno a 200 ºC y servirlo regado con la salsa. El tiempo que tiene que estar en el horno depende del grosos de las rodajas de salmón. Si son muy finas será suficiente con 12-13 minutos. Para rodajas gruesas es posible que se requieran hasta 17 minutos.

Aquí os dejo la receta. ¡Espero que la disfrutéis! :-)

¿Te gustan las recetas de salmón? Puedes encontrar más en nuestra Página de Recetas de Salmón.

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VÍDEO DE LA RECETA, INGREDIENTES E INSTRUCCIONES PASO A PASO:


En el siguiente vídeo en alta definición puedes ver las instrucciones de la receta paso a paso con imágenes. La música de este vídeo es Royalty Free y está disponible aquí:
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Salmón con Salsa Balsámica de Romero

Aunque por el color oscuro de la salsa de vinagre balsámico, este plato pueda no resultar muy atractivo a la vista, os puedo asegurar que ésta es una de las mejores recetas de salmón que he probado hasta el momento. El sabor de la salsa combina a la perfección con el salmón y el punto aromático del romero le da un toque maravilloso. Seguro que no dejarás que sobre nada :-)

INGREDIENTES:

Para la salsa balsámica de romero:
  • 120 ml (8 cucharadas) de vinagre balsámico de Módena
  • 60 ml (4 cucharadas) de vino blanco
  • 2 cucharadas de miel
  • 1 cucharada de mostaza de Dijon
  • 1 cucharada de romero fresco picado (dividido en dos mitades)
  • 1 diente de ajo machacado

Para el salmón:
  • 700 g de salmón en filetes o rodajas
  • Sal al gusto
  • Pimienta negra al gusto
  • 1 cucharada de aceite de oliva


INSTRUCCIONES DE LA RECETA:
  1. Saca el salmón de la nevera para que repose 10 minutos a temperatura ambiente antes de cocinarlo.
  2. Mientras tanto, pon en un cazo el vinagre balsámico de Módena, el vino blanco, la miel, la mostaza de Dijon, media cucharada de romero fresco picado y el diente de ajo machacado.
  3. Lleva la mezcla anterior a a ebullición, baja el fuego y cuécela a fuego lento durante unos 13-15 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que la salsa comience a espesar (ten en cuenta que, a medida que vaya enfriándose, espesará más). Retírala del fuego y ponla en el recipiente que vayas a utilizar para servirla.
  4. Añade sal y pimienta negra al gusto a los filetes o rodajas de salmón. Calienta una cucharada de aceite de oliva en una sartén o plancha grande. Cocina los filetes o rodajas de 2 en dos suficientemente separados a fuego medio-fuerte durante unos minutos, hasta que estén dorados. Dales la vuelta y cocínalos por el otro lado hasta que se doren. Por dentro el salmón debe estar hecho pero jugoso.
  5. Sírvelo regado con la salsa balsámica y espolvoreado con el romero fresco restante (media cucharada).
¡Y a disfrutarlo!


domingo, 24 de agosto de 2014

Ricotta Cheesecake (Tarta de Queso Ricotta)

Ricotta Cheesecake (Tarta de Queso Ricotta)


Esta es una tarta de queso de sabor suave y textura ligera con base de galleta. Sienta fenomenal en el postre de los días calurosos cuando está recién sacada de la nevera.

Se puede tomar sola, acompañada de fruta fresca como fresas, frambuesas, arándanos, etc, o bien con una compota de fruta como nuestra compota de fresas.



Sobre los ingredientes...



Esta tarta no lleva harina. Sus ingredientes básicos son queso, azúcar y huevos, y se aromatiza (opcionalmente, según el gusto de cada uno) con ralladura de limón y extracto de vainilla. También se usa almidón de maíz que hace las funciones de espesante. El almidón de maíz es más conocido por el nombre comercial de Maizena.

La base se hace con galletas trituradas, molidas o machacadas, un poco de azúcar y mantequilla derretida. Lo mejor es usar galletas de tipo "Digestive", pero también valen galletas de tipo "María".

El queso empleado en la receta es de dos tipos:
- Ricotta, que aporta un sabor suave y una textura ligera.
- Queso crema de untar de tipo Philadelphia, que proporciona sabor.

El queso ricotta es un queso de origen italiano que se obtiene a partir del suero de leche que sobra de hacer otros quesos blandos y se cuece a alta temperatura. Es de color blanco, sabor suave, y textura blanda y granulosa. Es muy producto fresco que hay que consumir rápidamente ya que sólo aguanta en buenas condiciones algunos días después de su fabricación. En España este tipo de queso también se conoce como requesón y se produce principalmente en las regiones del norte del país (Cantabria, Pirineos, Galicia).

A veces el queso ricotta viene un poco acuoso. En este caso, es necesario escurrir el agua antes de usar el queso en la receta.

Para que la tarta quede perfecta es importante que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente. Si el queso está a la temperatura de la nevera, es más probable que queden grumos.



Sobre la forma de prepararla...



Esta tarta es muy fácil de hacer.

Para hacer la base de galleta es necesario triturar las galletas hasta que prácticamente se reducen a polvo. Esto se puede hacer usando una batidora eléctrica con el accesorio triturador o bien un robot de cocina. Si no dispones de ninguna de estas dos herramientas, introduce las galletas en una bolsa para congelados, ciérrala expulsando el aire, ponla sobre la encimera de la cocina y golpea las galletas con un objeto rígido, por ejemplo, un rodillo de cocina, el mango de un cuchillo, un martillo de madera...

Una vez que las galletas están trituradas, sólo hay que mezclarlas con mantequilla derretida y un poco de azúcar y extender esta mezcla sobre la base de un molde, presionando para que quede una capa firme y uniforme.

Para hacer la pasta para el relleno de queso hay que batir los ingredientes incorporándolos a la mezcla poco a poco (prácticamente de uno en uno). Para ello puedes usar un robot de cocina, una batidora eléctrica con el accesorio de triturar o bien con el accesorio de varillas, o incluso hacerlo a mano.

Si se usa un robot de cocina o una batidora eléctrica es importante batir a velocidad lenta. De lo contrario la pasta cogerá aire y esto puede hacer que la tarta suba mucho durante el horneado para quedar encogida de nuevo al enfriarse. Al subir tanto, podrían salir grietas sobre su superficie.

La tarta hay que hornearla al baño maría, es decir, el molde desmontable en el que se prepara se recubre de papel de aluminio (varias capas, si es necesario, para evitar que entre agua), se pone en una bandeja de hornear profunda y se añade a la bandeja agua caliente. El agua caliente debe llegar hasta la mitad de las paredes del molde y debe estar prácticamente hirviendo.

La tarta estará hecha cuando los bordes comiencen a dorarse ligeramente (sin llegar a hacerlo) y, al agitar un poco el molde, la tarta debe moverse con un ligero temblor.

Una vez fuera del horno, hay que sacarla de la bandeja con agua y dejar que se enfríe sobre una rejilla. Después, lo mejor es tenerla en la nevera al menos 4 horas, o toda la noche, antes de consumirla para que los sabores se mezclen bien.



Sobre su manipulación y conservación...



Un truco para cortar la tarta sin problemas consiste en introducir el cuchillo que vayas a utilizar en agua caliente durante unos segundos. Después se seca con un paño limpio y se hace un corte en la tarta. Se repite la operación antes de cada corte. Así los cortes serán mucho más limpios y no te costará nada de trabajo cortar las porciones de la tarta.

Esta tarta debe almacenarse en la nevera. Aguanta perfectamente 3 o 4 días. También se puede congelar. En este caso, lo mejor es descongelarla dentro de la nevera.

Aquí os dejo la receta. ¡Espero que la disfrutéis! :-)

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VÍDEO DE LA RECETA, INGREDIENTES E INSTRUCCIONES PASO A PASO:



En el siguiente vídeo en alta definición puedes ver las instrucciones de la receta paso a paso con imágenes. La música de este vídeo es Royalty Free y está disponible aquí:
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Ricotta Cheesecake (Tarta de Queso Ricotta)

Esta es una tarta de queso de sabor suave y textura ligera con base de galleta. Sienta fenomenal en el postre de los días calurosos cuando está recién sacada de la nevera. Se puede tomar sola, acompañada de fruta fresca como fresas, frambuesas, arándanos, etc, o bien con una compota de fruta como nuestra compota de fresas.

INGREDIENTES:

Para la base:
  • 120 g de galletas de tipo Digestive
  • 2 cucharadas de azúcar
  • 65 g de mantequilla derretida

Para la tarta de queso ricotta:
  • 225 g de queso crema de untar de tipo Philadelphia, a temperatura ambiente
  • 450 g de queso ricotta (*), a temperatura ambiente
  • 200 g de azúcar
  • 1 cucharada de almidón de maíz (Maizena)
  • 1/4 de cucharadita de sal
  • 4 huevos, a temperatura ambiente
  • La ralladura de 1 limón
  • 1 y 1/2 cucharaditas de extracto de vainilla

(*) Si el queso ricotta tiene agua, escúrrelo muy bien


INSTRUCCIONES DE LA RECETA:
    En primer lugar se prepara la base de la tarta...

  1. Precalienta el horno a 180 ºC y unta de mantequilla un molde redondo desmontable de 24 cm de diámetro.
  2. Tritura las galletas con un robot de cocina con el accesorio triturador o una batidora/trituradora eléctrica. También puedes hacerlo de forma manual introduciendo las galletas dentro de una bolsa de congelados, cerrando la bolsa sacando el aire y golpeándolas con un objeto rígido. Las galletas deben quedar prácticamente reducidas a polvo. Deben tener la consistencia de pan rallado muy fino.
  3. Pon las galletas trituradas en una fuente o bol y añade el azúcar y la mantequilla derretida. Mézclalo con una cuchara hasta que las galletas se humedezcan por completo. Si coges un poco de la mezcla y la presionas con el dedo pulgar y el índice, debe pegarse.
  4. Vierte la mezcla en un molde desmontable de 24 cm untado de mantequilla. Distribúyela uniformemente por la base con una cuchara o con los dedos y presiónala contra la base del molde hasta tener una capa rígida con grosor uniforme.
  5. Recubre el molde con 2 o 3 capas de papel de aluminio. Ten en cuenta que la tarta se hornea al baño maría y hay que evitar que entre agua en el molde.
  6. Pon el molde en la nevera mientras preparas la mezcla de queso.

  7. A continuación se prepara la mezcla de queso...

  8. Pon en una fuente amplia el queso de untar y bátelo (con una batidora eléctrica, robot de cocina o de forma manual) a velocidad lenta hasta que tenga la consistencia de una crema.
  9. Añade el queso Ricotta y el azúcar y vuelve a batir (velocidad lenta) hasta obtener una mezcla suave y cremosa (sin grumos).
  10. Añade el almidón de maíz (Maizena) y la sal y bate hasta que se incorporen a la mezcla.
  11. Añade los huevos de uno en uno batiendo después de cada adición (velocidad lenta) hasta que se incorporan a la mezcla. La mezcla resultante debe ser bastante líquida.
  12. Añade la ralladura de limón y el extracto de vainilla y bate hasta que se incorporan a la mezcla.

  13. Y por último, se monta la tarta y se hornea al baño maría

  14. Saca el molde de la nevera y vierte en él la mezcla de queso.
  15. Coloca el molde en una bandeja de hornear con agua muy caliente (será necesario calentarla previamente en una cazuela), casi hirviendo. La cantidad de agua debe ser suficiente para que llegue a la mitad de la pared del molde. Lo mejor es poner el molde en la bandeja y después añadir el agua necesaria.
  16. Hornea durante 50 - 60 minutos a 180 ºC. Cuando la tarta esté hecha, verás que comienza a ponerse ligeramente dorada (sin llegar a estarlo) y, si agitas el molde, la tarta debe temblar.
  17. Tras sacarla del horno deja que se enfríe sobre una rejilla. Después, métela en la nevera durante 4 horas o bien toda la noche. Antes de desmoldarla, pasa un cuchillo por el borde.
¡Y a disfrutarlo!


miércoles, 13 de agosto de 2014

Ensalada de Tomates al Estilo Egipcio

Ensalada de Tomates al Estilo Egipcio


Esta ensalada está formada por rodajas de tomates marinados en una mezcla de especias y hierbas aromáticas sobre una cama de hojas de rúcula fresca. La marinada consigue intensificar de forma sorprendente el sabor de los tomates y darles el toque exótico de la cocina árabe.

Es perfecta como primer plato o entrante, también como ensalada para acompañar al plato principal, o bien, como plato en una comida o cena a base de tapas para compartir. Si además tienes invitados, les sorprenderás seguro :-)


Sobre los ingredientes...

Para hacer la marinada se utiliza ajo machacado, comino molido, pimienta negra recién molida, perejil, cilantro, zumo y ralladura de limón, aceite de oliva y vinagre. Con esta mezcla, hasta los tomates menos sabrosos consiguen un sabor riquísimo.

Comino en grano y comino molido
Comino en Grano y Molido
El comino es una especia que se asocia fundamentalmente con los currys de la cocina India y con la cocina árabe, aunque también se usa mucho en la cocina española, sobre todo en la zona sureste de la península y en Canarias (es un ingrediente fundamental en los mojos canarios).

La especia es en realidad el fruto de la planta "Cuminum cyminum", también con el nombre común de comino.

Son unas semillas muy pequeñas y alargadas. Tan pequeñas, que de ahí viene la conocida expresión "me importa un comino".

En las tiendas se puede encontrar tanto en grano como molido. Si embargo, lo ideal es comprarlo en grano y molerlo justo antes de utilizarlo, si es posible, tostándolo antes. De esta forma se intensifican su sabor y su aroma.

Para molerlo se puede utilizar un molinillo, un procesador de alimentos (batidora con accesorio para triturar) o incluso algo tan simple como un mortero podrá hacer el trabajo.


Ramas de perejil y perejil picado
Perejil
Ramas de cilantro fresco y cilantro picado
Cilantro
¿Sabes cuáles son  las diferencias entre el cilantro y el perejil? Aunque pueda parecer que son la misma hierba, nada más lejos de la realidad...

Son parientes cercanos, pero tienen un sabor y aroma diferentes y, por tanto, no se puede sustituir una hierba por la otra o conseguiremos un resultado diferente.

El cilantro también se conoce con los nombre de culantro, guaraní, kuratu, perejil árabe o coriandro fresco.

La principal diferencia entre el perejil y el cilantro es el color. El perejil tiene un color verde mucho más intenso y algo más oscuro que el cilantro, de color verde más suave.

Por otro lado, el perejil tiene los tallos más gruesos y más firmes que el cilantro. Es muy fácil quebrar un tallo de perejil. Sin embargo, los del cilantro son más finos y más flexibles.

En cuanto a las hojas, las del perejil son más alargadas y más puntiagudas que las del cilantro, que son más redondeadas.

Por último, del cilantro se consumen tanto sus hojas como sus semillas (coriandro), especialmente en la cocina india y, a veces, se puede encontrar en el mercado junto con sus raíces.

La rúcula, rúgula o ruqueta ha sido cultivada como verdura en el Mediterráneo desde la época romana. Se usa fundamentalmente en ensaladas, pero en Italia es muy común verla en pizzas, añadiéndola tras el horneado. Tiene un sabor intenso, con un punto ligeramente picante y amargo.

Si no gusta la rúcula o no la encuentras fácilmente, puedes sustituirla por espinacas tiernas o bien por una mezcla de lechugas verdes.

Sobre la forma de prepararla...

Aunque no lleva mucho tiempo hacerla, esta ensalada hay que prepararla con antelación, ya que necesita que los tomates se marinen durante al menos 2 horas.

Para preparar la marinada sólo tienes que mezclar todos los ingredientes en un cuenco o un bol.

Después ya sólo queda impregnar los tomates con la marinada en una fuente amplia y dejarlos en la nevera cubiertos con film transparente durante 2 horas.

Es necesario darles la vuelta tras la primera hora para que todos se marinen por igual.

La fuente que utilices debe ser de base ancha para que el mayor número posible de rodajas de tomate estén en contacto con el jugo de la marinada.

Es importante servir la ensalada a temperatura ambiente, ya que así el sabor y el aroma es más intenso. Puedes sacarla de la nevera 20 minutos antes del momento en el que la vayas a servir.

Aquí os dejo la receta. ¡Espero que la disfrutéis! :-)



Puedes ver más recetas de ensaladas en nuestra página de Ensaladas.




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VÍDEO DE LA RECETA, INGREDIENTES E INSTRUCCIONES PASO A PASO:

En el siguiente vídeo en alta definición puedes ver las instrucciones de la receta paso a paso con imágenes. La música de este vídeo es Royalty Free y está disponible aquí:




Ensalada de Tomates al Estilo Egipcio

Esta ensalada está formada por rodajas de tomates marinados en una mezcla de especias y hierbas aromáticas sobre una cama de hojas de rúcula fresca. La marinada consigue intensificar de forma sorprendente el sabor de los tomates y darles el toque exótico de la cocina árabe.

INGREDIENTES:

  • 4 cucharadas de aceite de oliva virgen
  • 4 dientes de ajo machacados
  • 1 cucharadita de comino molido
  • 1 cucharadita de pimienta negra recién molida
  • 1 cucharadita de sal
  • La ralladura de 1 limón
  • El zumo de 1 limón
  • 4 cucharadas de vinagre de vino blanco
  • 4 cucharadas de perejil picado
  • 4 cucharadas de cilantro picado
  • 4 tomates grandes
  • 100 g de rúcula (puede sustituirse por espinacas frescas o una mezcla de lechugas verdes)


INSTRUCCIONES DE LA RECETA:
  1. Pon en un cuenco el aceite de oliva, los dientes de ajo machacados, el comino, la pimienta negra, la sal, la ralladura de limón, el zumo de limón, el vinagre de vino blanco, el perejil picado y el cilantro picado. Mézclalo bien. En el vídeo puedes ver el aspecto que debe tener.
  2. Lava los tomates y córtalos en rodajas de unos 0,7 cm. Ponlos en una fuente amplia de base ancha. Añade la mezcla anterior. Mézclalos para que se impregnen bien de la mezcla. Cubre la fuente con film transparente y métela en la nevera durante una hora.
  3. Tras una hora, saca la fuente y remueve de nuevo los tomates para que los que han quedado arriba se impregnen de nuevo de la mezcla. Vuelve a poner el film transparente y mete la fuente en la nevera una hora más.
  4. Puedes servir la ensalada en una fuente amplia o bien en platos individuales. En cualquiera de los dos casos, coloca las rodajas de tomate sobre una base de rúcula (o bien,espinacas o una mezcla de lechugas verdes) y riégalos con los jugos de la marinada.
  5. Recuerda servirla a temperatura ambiente, que estará más rica.
¡Y a disfrutarlo!


domingo, 10 de agosto de 2014

Fettuccine con Pesto de Aguacate y Tomates Secados al Sol



Si te gusta el sabor y el aroma de la albahaca y también te gusta el aguacate, este plato de pasta te encantará :-) Tiene una salsa sabrosa que recuerda al famoso pesto de albahaca, pero al mismo tiempo es muy cremosa y tiene la suavidad que proporciona el aguacate. Los tomates secados al sol proporcionan un sabor intenso que recuerda el verano.

Además de estar muy rico, se trata de un plato apto para los vegetarianos más estrictos, ya que no tiene ningún ingrediente de procedencia animal.

También se puede hacer con otro tipo de pastas largas y cintas, como por ejemplo, spaguetti, spaghettini, tallarines, tagliatelle, etc


Sobre los ingredientes...

Para preparar este plato, no son necesarios muchos ingredientes. Tan sólo aguacate, albahaca, ajo, zumo de limón recién exprimido y aceite de oliva, además del ingrediente principal, que son los fettuccine.

El aguacate o palta es famoso por ser el ingrediente principal del guacamole. Es una fruta con un contenido de azúcar bajísimo y por este motivo se consume mucho junto a verduras en ensaladas. Tiene muchos beneficios para la salud y entre ellos destacan los siguientes:

1) Es rico en grasa, pero esta grasa es "grasa buena". Se trata de ácidos grasos monoinsaturados que ayudan a disminuir los niveles de colesterol malo y a aumentar los niveles de colesterol bueno. Es decir, beneficia la salud cardiovascular.

2) Es rico en vitaminas, minerales y antioxidantes, que entre muchos otros beneficios, son buenísimos para la salud de la piel.

3) Es rico en fibra, y por tanto ayuda a saciar el apetito y combatir el estreñimiento.

Tarro de Tomates Secados al Sol en Aceite de Oliva
Tomates Secados al Sol en Aceite
Los tomates secados al sol, tomates secos o tomates deshidratados son tomates maduros que pasan por un proceso lento de secado que hace que pierdan el contenido de agua de su interior de forma que su sabor se hace más intenso.

La forma tradicional de hacerlos era partirlos a la mitad y colocarlos boca abajo, con la piel hacia arriba, en los tejados de las casas sobre una cama de sal. Se dejaban varios días (dependiendo del tipo de tomate, incluso una semana) hasta que alcanzaban el punto óptimo de deshidratación.

Hoy en día existen procesos industriales que aplican calor artificial para conseguir la deshidratación. Como siempre, lo natural es mucho mejor, pero también su precio es mucho mayor. Los tomates secados al sol de forma natural están considerados una delicatessen.

Los puedes encontrar en dos formatos: completamente deshidratados en bolsitas, o bien, en tarros conservados en aceite. Están mucho más ricos los que vienen en aceite, ya que contienen hierbas aromáticas como el orégano que aportan sabor adicional. Eso sí, mejor que el aceite sea aceite de oliva, que proporciona un mejor sabor.

Albahaca Fresca
Si no encuentras los tomates en aceite, puedes usar de los que vienen en bolsas, pero tendrás que hidratarlos previamente, ya que vienen completamente secos.

La albahaca es una de la hierbas aromáticas más representativas de la cocina italiana. Con ella se prepara la famosa salsa "pesto de albahaca genovés" o "pesto di basilico", una salsa a base de hojas de albahaca fresca, piñones, ajo, aceite de oliva y queso parmesano, originaria de la región de Liguria.

En esta receta, la albahaca aporta sabor y aroma a la crema a base de aguacate.


Sobre el procedimiento para prepararlos...

Esta receta es muy fácil de hacer y, además, puede estar hecha en poco tiempo, ya que podemos preparar la salsa mientras se calienta el agua para cocer la pasta.

Para preparar la salsa simplemente hay que triturar todos los ingredientes en un procesador de alimentos o con una batidora/trituradora hasta conseguir una crema.

Al igual que en otros platos de pasta, es importante servirlo inmediatamente, nada más que se haya mezclado la pasta con el pesto de aguacate, ya que es el momento en el que está en su punto óptimo.

Sobre su conservación...

Desafortunadamente, esta salsa no se conserva bien debido a que, el aguacate que contiene, con el tiempo, se oxida y se pone de color marrón.

Es necesario servirla en el plato y consumirla inmediatamente, nada más hecha, y no hay que dejar que quede nada para otro día.


Aquí os dejo la receta. ¡Espero que la disfrutéis! :-)

Puedes encontrar más recetas de pasta y consejos para que la pasta te quede perfecta en nuestra página de pasta italiana.



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VÍDEO DE LA RECETA, INGREDIENTES E INSTRUCCIONES PASO A PASO:

En el siguiente vídeo en alta definición puedes ver las instrucciones de la receta paso a paso con imágenes. La música de este vídeo es Royalty Free y está disponible aquí.




Fettuccine con Pesto de Aguacate y Tomates Secados al Sol

Si te gusta el sabor y el aroma de la albahaca y también te gusta el aguacate, este plato de pasta te encantará :-) Tiene una salsa sabrosa que recuerda al famoso pesto de albahaca, pero al mismo tiempo es muy cremosa y tiene la suavidad que proporciona el aguacate. Los tomates secados al sol proporcionan un sabor intenso que recuerda el verano. Además de estar muy rico, se trata de un plato apto para los vegetarianos más estrictos, ya que no tiene ningún ingrediente de procedencia animal.

INGREDIENTES:

Para la salsa:
  • 1 aguacate
  • 5 g de hojas de albahaca fresca
  • 1 diente de ajo
  • 1 cucharada de zumo de limón recién exprimido
  • ½ cucharadita de sal (o bien , sal al gusto)
  • Pimienta negra al gusto
  • 3 cucharadas de aceite de oliva virgen
  • 50 g de tomates secados al sol en aceite, bien escurridos y troceados

Para la pasta:
  • 225 g de fettuccine secos al huevo
  • 4 litros de agua
  • Una cucharada de sal

NOTA: Las cantidades son únicamente para dos personas (con el plato bien lleno :-)). Se puede ampliar fácilmente a 4 - 5 personas multiplicando por 2 todas las cantidades.


INSTRUCCIONES DE LA RECETA:
  1. Ponemos a hervir 4 litros de agua en una cazuela grande.
  2. Ponemos en el vaso de la batidora el aguacate pelado, las hojas de albahaca fresca, un diente de ajo, una cucharada de zumo de limón recién exprimido, ½ cucharadita de sal (o bien , sal al gusto) y 3 cucharadas de aceite de oliva, y lo trituramos hasta que se obtiene una crema.
  3. Pasamos la crema a una fuente grande y añadimos los tomates secados al sol troceados.
  4. Cuando el agua comienza a hervir, añadimos una cucharada sopera de sal y añadimos toda la pasta al mismo tiempo.
  5. Cuando la pasta está al dente, la colamos, la mezclamos con la salsa y servimos inmediatamente.
¡Y a disfrutarlo!


martes, 5 de agosto de 2014

Espárragos con Salsa Balsámica de Mantequilla Tostada



¿Alguien pensaba que comer verdura es aburrido? ¡Estos espárragos asados al horno acompañados de la salsa balsámica de mantequilla tostada están simplemente deliciosos! :-) Está garantizado que no quedará nada en el plato :-)

Es una receta muy sencilla, saludable, rápida y con un resultado excepcional, para comer verdura sin renunciar al sabor. Es perfecta como entrante, sobre todo en cenas de verano, para acompañar otros platos, o para compartir en una comida o cena a base de tapas. Además, es apta para vegetarianos.


Sobre los ingredientes...

Salsa de Soja
Esta receta no requiere muchos ingredientes. Aparte de los espárragos, que van sazonados con sal y pimienta y regados con aceite de oliva, sólo se necesita mantequilla, salsa de soja y vinagre balsámico de Módena para hacer la salsa.

La salsa de soja se obtiene de la fermentación de las semillas de soja y es muy fácil encontrarla en los supermercados. Lo mejor es elegir una que se haya fermentado de forma natural y no mediante procesos industriales. Aquellos a los que la salsa de soja no les guste por su sabor salado, no tienen que preocuparse ya que la salsa lleva poca cantidad y su sabor es casi inapreciable.

El vinagre balsámico o aceto balsámico es un vinagre de origen italiano, concretamente de la ciudad de Módena. Destaca por su sabor fuerte, ligeramente dulce y su color oscuro. El vinagre hecho de la forma tradicional requiere una maduración de al menos 12 años. Sin embargo, las versiones industriales reducen muchísimo este tiempo para reducir el coste.

Al igual que la salsa de soja, es muy fácil encontrarla en los supermercados.


Sobre la forma de prepararlos...

El procedimiento para prepararlos en muy sencillo y al mismo tiempo muy rápido. Hay que asar los espárragos al horno y durante ese tiempo (unos 15 minutos) se puede aprovechar para preparar la salsa. El único punto en el que hay que tener un cuidado especial es a la hora de tostar la mantequilla, ya que un descuido podría hacer que en lugar de conseguir mantequilla tostada consigamos mantequilla quemada.

El procedimiento para tostar la mantequilla consiste en ponerla a fuego medio hasta que toma un color dorado. Lo primero que ocurrirá es que la mantequilla se derretirá y a continuación, con el calor, empezará a salir espuma. Esto ocurre porque se separa el agua de la grasa y de los residuos sólidos de la mantequilla. Un poco más tarde, los sólidos se empezarán a poner dorados.

En este punto, al tostarse desprende un característico aroma a avellana, por eso en francés se conoce con el nombre de "beurre noisette" o "mantequilla avellana". Es importante retirarla inmediatamente del utensilio de cocina en el que la hemos tostado, ya que, aunque apaguemos el fuego, se seguirá tostando con el calor residual y puede llegar a quemarse. Y la mantequilla quemada, además de un color feo, tiene un sabor amargo. Nada que ver con el delicado sabor de la mantequilla tostada.

Para tostar la mantequilla es importante elegir bien el utensilio de cocina. Debe tener un color claro, para que se pueda apreciar bien el color de la mantequilla. Por ejemplo, una sartén oscura, no dejaría ver bien en qué punto se encuentra la mantequilla y tendríamos una alta probabilidad de quemarla. Lo mejor es emplear un cazo de color claro o de aluminio.

También es importante que el fuego sea medio y no alto, para que el proceso sea más lento y nos de tiempo a reaccionar a tiempo cuando se alcance el punto óptimo.

Aquí os dejo la receta. ¡Espero que la disfrutéis! :-)

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VÍDEO DE LA RECETA, INGREDIENTES E INSTRUCCIONES PASO A PASO

En el siguiente vídeo en alta de definición puedes ver las instrucciones de la receta paso a paso con imágenes. La música de este vídeo es Royalty Free y está disponible aquí.



Espárragos con Salsa Balsámica de Mantequilla Tostada

¿Alguien pensaba que comer verdura es aburrido? ¡Estos espárragos asados al horno acompañados de la salsa balsámica están simplemente deliciosos! :-) Está garantizado que no quedará nada en el plato :-) Es una receta muy sencilla, rápida y con un resultado excepcional, para comer verdura sin renunciar al sabor. Es perfecta como entrante, sobre todo en cenas de verano, o para compartir en una comida o cena a base de tapas. Además, es apta para vegetarianos.

INGREDIENTES:

  • 900 g de espárragos trigueros
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • 1/4 cucharadita de sal
  • 1/8 de cucharadita de pimienta negra
  • 50 g de mantequilla
  • 4 cucharaditas de salsa de soja
  • 2 cucharaditas de vinagre balsámico


INSTRUCCIONES DE LA RECETA:
  1. Precalienta el horno a 205 ºC.
  2. Lava los espárragos y corta las partes duras de los tallos.
  3. Colócalos en una bandeja de hornear suficientemente grande como para que no queden amontonados y esparce por encima la sal, la pimienta negra y el aceite de oliva. Muévelos con una cuchara revolviéndolos para que se impregnen todos por igual.
  4. Hornéalos durante 15 o 20 minutos dependiendo de cómo te gusten de hechos y de cómo sea tu horno.
  5. Mientras tanto, pon la mantequilla a fuego medio en un cazo de color claro o de aluminio. Deja que se tueste removiendo de vez en cuando (no continuamente). En cuando los residuos sólidos empiecen a ponerse dorados (puedes ver imágenes en el vídeo), apaga el fuego y pon la mantequilla en un cuenco pequeño. No la dejes en el recipiente donde la has tostado porque seguirá tostándose con el calor residual.
  6. Añade a la mantequilla, la salsa de soja, el vinagre balsámico y mézclalo.
  7. Tras sacar los espárragos del horno, colócalos en la bandeja de servir, vierte la salsa por encima y remuévelos para que todos se impregnen de la salsa por igual.
  8. NOTA: La salsa tenderá a separarse. Si es necesario mézclala de nuevo antes de verterla por encima de los espárragos.

¡Y a disfrutarlo!