lunes, 6 de julio de 2015

Pechuga de Pollo con Salsa de Champiñones, Mostaza y Estragón



¿Quien dijo que comer pechuga de pollo es aburrido? Hoy os traemos una receta de pechuga de pollo deliciosa, con un sabor exquisito y muy aromática, gracias a la salsa de champiñones, mostaza y estragón fresco.

Como tiene gran cantidad de salsa, podemos acompañarla de arroz blanco, o bien de pasta, y así podemos tener un plato único muy completo. El arroz o la pasta estarán riquísimas impregnadas de la salsa.

Y si decides tomarla sola como segundo plato, ten a mano un buen pan para mojarlo en la salsa :-).


Sobre los ingredientes...

Para preparar la salsa que acompaña a la pechuga de pollo se necesitan champiñones, chalota, ajo, vino blanco, nata líquida (crema de leche), caldo de pollo, mostaza a la antigua y estragón.

Estragón Fresco
El estragón es una hierba aromática cuyas hojas  se usan para aromatizar salsas, adobos, marinadas y ensaladas.

Tiene un sabor anisado con toques dulces y ligeramente picantes.

También se conoce como dragoncillo o hierba de dragón.

Se usa mucho en la cocina del norte y del este de Europa y en la gastronomía de Francia es un ingrediente fundamental.

Hay dos tipos: el estragón francés y el estragón ruso. El más utilizado es el francés, ya que el estragón ruso es de otra especie distinta, menos aromática y algo amarga.

No hay que confundir el estragón francés con el estragón mejicano que se usa en el mole verde típico de Jalisco, ya que este último es una planta diferente.

El estragón se puede encontrar fresco o seco. En esta receta, se usa estragón fresco.

Chalotas
La mostaza a la antigua se diferencia de la mostaza de Dijon porque, mientras que en la primera los granos de mostaza están completamente triturados, en la mostaza a la antigua sólo se trituran parcialmente, quedan muchos enteros y se pueden apreciar perfectamente. Tienen sabores ligeramente diferentes. La mostaza de Dijón tiene un sabor más intenso y picante.

Las chalotas también se conocen con el nombre de escalonias, echalotes o echalotas y son unos bulbos de la misma familia que la cebolla, el ajo y el puerro. Son más pequeñas que las cebollas, son muy aromáticas y tienen un sabor suave, dulce y delicado parecido a una mezcla entre cebolla y ajo.

Recuerda que para limpiar los champiñones no está recomendado sumergirlos en agua, ya que absorben gran cantidad de agua y, al expulsarla, con ella también se va su sabor. Hay que intentar usar la mínima cantidad de agua posible y además sin sumergirlos. Si no están muy sucios, puede ser suficiente limpiarlos con un paño mojado.

Sobre la forma de prepararla...

Esta receta es muy fácil de hacer y además se puede preparar en unos 40 minutos.

En primer lugar hay que sellar la pechuga de pollo cortada en filetes. Para ello se pasa por la sartén con aceite de oliva a fuego medio fuerte hasta que se dore.

El objetivo es dorar la carne por la parte exterior para que los jugos queden en el interior. Así nos quedará la carne jugosa.

Para el ello el fuego debe ser suficientemente fuerte sin llegar a quemar la carne. No pasa nada si por dentro no quedan muy hechas ya que después volverán a la sartén unos minutos más cuando la salsa esté preparada.

Si el fuego no fuera suficientemente fuerte, la carne quedará más seca.

Para preparar la salsa tan sólo hay que saltear los champiñones, la chalota y el ajo, añadir el vino blanco, la nata, el caldo de pollo y la mostaza y dejar que se reduzca. El estragón fresco se añade al final.

La salsa de esta receta no es muy espesa. Si te gusta más densa, reduce la cantidad de caldo de pollo.

Sobre su conservación...

Esta receta está mejor cuando está recién hecha. Sin embargo, si te sobra, se puede guardar en la nevera y consumirla en otro momento.

Para calentarla utiliza la sartén en lugar del microondas, ya que el microondas puede hacer que quede más seco. Caliéntala a fuego lento, con la sartén tapada con una tapa para evitar que la salsa se evapore.


Aquí os dejo la receta. ¡Espero que la disfrutéis! :-)

¿Te gusta el pollo? Puedes encontrar más recetas en nuestra Página de Recetas de Pollo.

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VÍDEO DE LA RECETA, INGREDIENTES E INSTRUCCIONES PASO A PASO:
En el siguiente vídeo en alta definición puedes ver las instrucciones de la receta paso a paso con imágenes. La música de este vídeo es Royalty Free y está disponible aquí:
Winds Of Inspiration




Pechuga de Pollo con Salsa de Champiñones, Mostaza y Estragón

¿Quien dijo que comer pechuga de pollo es aburrido? Hoy os traemos una receta de pechuga de pollo deliciosa, con un sabor exquisito y muy aromática, gracias a la salsa de champiñones, mostaza y estragón fresco. Como tiene gran cantidad de salsa, podemos acompañarla de arroz blanco, o bien de pasta, y así podemos tener un plato único muy completo. El arroz o la pasta estarán riquísimas impregnadas de la salsa.

INGREDIENTES:

  • 2 pechugas de pollo
  • Sal al gusto
  • Pimienta negra al gusto
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • 225 g de champiñones en láminas finas
  • 1 chalota picada fina
  • 1 diente de ajo machacado
  • 125 ml de vino blanco
  • 125 ml de nata líquida (crema de leche)
  • 200 ml de caldo de pollo, o bien, 200 ml de agua y media pastilla de concentrado de caldo
  • 2 cucharadas de mostaza a la antigua
  • 2 cucharadas de estragón fresco picado
  • Sal y pimienta negra al gusto


INSTRUCCIONES DE LA RECETA:
  1. Limpia los champiñones y córtalos en láminas finas (puedes ver imágenes en el vídeo). Pica la chalota.
  2. Corta longitudinalmente las pechugas de pollo por la mitad, dividiendo cada una en 2 filetes del mismo grosor (puedes ver imágenes en el vídeo). Añade sal y pimienta negra recién molida a tu gusto.
  3. Calienta una cucharada de aceite de oliva en una buena sartén a fuego medio-fuerte. Cocina los filetes por tandas hasta que estén dorados por el lado que está en contacto con la sartén. El fuego tiene que ser lo suficientemente fuerte para que la carne se dore por fuera quedando muy jugosa por dentro, sin llegar a quemar demasiado la parte exterior. Dales la vuelta y cocínalos unos minutos más por el otro lado hasta que estén dorados. Resérvalos en un plato hasta que la salsa esté hecha.
  4. Para preparar la salsa, añade a la sartén otra cucharada de aceite y la chalota picada. Cocínala a fuego medio-fuerte dando vueltas continuamente durante 1 minuto.
  5. Añade el ajo machacado y cocínalo dando vueltas continuamente durante 30 segundos o 1 minuto como máximo. Ten cuidado de que el fuego no sea demasiado fuerte, ya que podría tostarse demasiado o quemarse y esto no es deseable ya que tendría un sabor amargo. Hay que cocinarlo sólo hasta que empieza a desprender olor.
  6. Añade los champiñones en láminas y cocínalos a fuego medio-fuerte dando vueltas con una cuchara frecuentemente hasta que se hayan reducido y estén marrones (puedes ver imágenes en el vídeo). Esto llevará unos 7-8 minutos.
  7. Añade el vino, la nata líquida y el caldo de pollo (o la misma cantidad de agua y 1/2 pastilla de concentrado de caldo). Llévalo a ebullición y deja que se reduzca a la mitad (unos 8-10 minutos).
  8. Añade la mostaza y el estragón picado. Mézclalo bien con la salsa
  9. Añade el pollo a la sartén, llévalo a abullición y déjalo 3-5 minutos más.
  10. Antes de servir rectifica la sal y la pimienta si lo consideras necesario.
¡Y a disfrutarlo!


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