Suscripción correo móviles

sábado, 22 de noviembre de 2025

Pechuga de Pollo con Salsa de Champiñones, Mostaza y Estragón

Pechuga de Pollo con Salsa de Champiñones, Mostaza y Estragón


¿Quien dijo que comer pechuga de pollo es aburrido? Hoy os traemos una receta de pechuga de pollo en salsa de champiñones deliciosa, con un sabor exquisito y muy aromática, gracias a la mostaza y estragón fresco.

La verdadera magia de este plato reside en la armonía de su salsa, que transforma una simple pechuga de pollo en una experiencia gourmet. Aquí te explicamos por qué estos ingredientes, y en particular el estragón, están hechos el uno para el otro:

  • El Poder del Estragón: El estragón (o dragoncillo) es la estrella indiscutible. Su sabor único, ligeramente anisado y dulce, tiene la capacidad de cortar la riqueza de la nata y el umami terroso de los champiñones, aportando una frescura que otros condimentos no logran. Usarlo fresco, como en esta receta, maximiza su aroma.

  • El Toque de Mostaza: La mostaza a la antigua no solo añade una textura rústica con sus semillas enteras, sino que su acidez sutil actúa como un puente de sabor entre la dulzura del vino blanco reducido y la cremosidad de la nata. Sin ella, la salsa se sentiría plana; con ella, se vuelve vibrante y compleja.

  • La Textura Terrosa: Los champiñones y las chalotas salteadas ofrecen la base umami y la textura suave que envuelve la pechuga. Al cocinarse lentamente en el vino, liberan sus jugos y profundizan el sabor de todo el conjunto.

Como esta receta tiene gran cantidad de salsa, podemos acompañarla de arroz blanco, o bien de pasta, y así podemos tener un plato único muy completo. El arroz o la pasta estarán riquísimas impregnadas de la salsa de champiñones. Si prefieres una opción baja en carbohidratos, prueba nuestro arroz de coliflor.

Y si decides tomarla sola como segundo plato, ten a mano un buen pan para mojarlo en la salsa :-). Aquí tienes algunas ideas de panes caseros fáciles de hacer.


Sobre los ingredientes...


La lista completa de ingredientes con sus cantidades exactas la puedes encontrar en la versión imprimible de la receta más abajo ⬇️. Aquí te contamos algunas curiosidades sobre los ingredientes y cuál es su papel en la receta.

Para preparar la salsa que acompaña a la pechuga de pollo se necesitan champiñones, chalota, ajo, vino blanco, nata líquida (crema de leche), caldo de pollo, mostaza a la antigua y estragón.

Estragón
Estragón Fresco
El estragón es una hierba aromática cuyas hojas  se usan para aromatizar salsas, adobos, marinadas y ensaladas.

Tiene un sabor anisado con toques dulces y ligeramente picantes.

También se conoce como dragoncillo o hierba de dragón.

Se usa mucho en la cocina del norte y del este de Europa y en la gastronomía de Francia es un ingrediente fundamental.

Hay dos tipos: el estragón francés y el estragón ruso. El más utilizado es el francés, ya que el estragón ruso es de otra especie distinta, menos aromática y algo amarga.

No hay que confundir el estragón francés con el estragón mejicano que se usa en el mole verde típico de Jalisco, ya que este último es una planta diferente.

El estragón se puede encontrar fresco o seco. En esta receta, se usa estragón fresco.

Chalotas
Chalotas
La mostaza a la antigua se diferencia de la mostaza de Dijon porque, mientras que en la primera los granos de mostaza están completamente triturados, en la mostaza a la antigua sólo se trituran parcialmente, quedan muchos enteros y se pueden apreciar perfectamente. Tienen sabores ligeramente diferentes. La mostaza de Dijón tiene un sabor más intenso y picante.

Las chalotas también se conocen con el nombre de escalonias, echalotes o echalotas y son unos bulbos de la misma familia que la cebolla, el ajo y el puerro. Son más pequeñas que las cebollas, son muy aromáticas y tienen un sabor suave, dulce y delicado parecido a una mezcla entre cebolla y ajo.

Recuerda que para limpiar los champiñones no está recomendado sumergirlos en agua, ya que absorben gran cantidad de agua y, al expulsarla, con ella también se va su sabor. Hay que intentar usar la mínima cantidad de agua posible y además sin sumergirlos. Si no están muy sucios, puede ser suficiente limpiarlos con un paño mojado.

Sobre la forma de prepararla...


La versión imprimible de las instrucciones de la receta y el vídeo paso a paso de la receta los puedes encontrar más abajo ⬇️.

Pechuga de Pollo con Salsa de Champiñones, Mostaza y Estragón
Esta receta es muy fácil de hacer y además se puede preparar en unos 40 minutos.

Cómo cocinar la pechuga de pollo


En primer lugar hay que sellar la pechuga de pollo cortada en filetes. Para ello se pasa por la sartén con aceite de oliva a fuego-medio fuerte hasta que se dore.

El objetivo es dorar la carne por la parte exterior para que los jugos queden en el interior. Así nos quedará la carne jugosa.

Para el ello el fuego debe ser suficientemente fuerte sin llegar a quemar la carne. No pasa nada si por dentro no quedan muy hechas, ya que después volverán a la sartén unos minutos más cuando la salsa esté preparada.

Si el fuego no es suficientemente fuerte y se cocinan mucho tiempo, la carne quedará más seca.

Cómo hacer la salsa de champiñones, mostaza y estragón


Para preparar la salsa tan sólo hay que saltear los champiñones, la chalota y el ajo, añadir el vino blanco, la nata (crema de leche), el caldo de pollo y la mostaza y dejar que se reduzca. El estragón fresco se añade al final.

La salsa de esta receta no es muy espesa. Si te gusta más densa, reduce la cantidad de caldo de pollo.

Sobre su conservación...


Esta receta de Pechuga de Pollo con Salsa de Champiñones, Mostaza y Estragón está indiscutiblemente mejor cuando se disfruta recién hecha, con la salsa fresca y el pollo jugoso. Sin embargo, si te sobran porciones o decides prepararla con antelación, puedes seguir los consejos que te damos a continuación.

El almacenamiento en la nevera


  • Deja que el plato se enfríe a temperatura ambiente (no más de una hora) antes de guardarlo.
  • Transfiere las sobras (pollo y salsa juntos) a un recipiente hermético de vidrio o plástico. El buen sellado es clave para mantener la frescura y evitar que el pollo se seque o que absorba otros olores de la nevera.
  • Se conservará en buen estado en el refrigerador durante 3 a 4 días sin problemas.

Consejos para recalentarla


El microondas es rápido, pero puede resecar el pollo y separar la emulsión de la salsa. Te recomendamos utilizar una sartén en su lugar siguiendo estos pasos para mantenerla jugosa:
  • Paso 1: Calienta la sartén a fuego bajo o medio-bajo.
  • Paso 2: Vierte el pollo con toda la salsa.
  • Paso 3: Cubre la sartén con una tapa. Esto es crucial, ya que el vapor que se genera evitará que la salsa se evapore demasiado y mantendrá la humedad en el pollo.
  • Paso 4: Calienta lentamente hasta que esté humeante (unos 5-8 minutos).
Ajuste de Salsa: Si notas que la salsa se ha espesado mucho o se ha evaporado, puedes añadir una o dos cucharadas de caldo de pollo o un poco de nata líquida justo antes de servir para revivir la cremosidad.

Congelación (OPCIONAL)


Se puede congelar. Si decides hacerlo, transfiere la salsa y el pollo a un recipiente hermético apto para congelador, dejando un pequeño espacio para la expansión. Se conservará hasta por 3 meses.

Descongela en la nevera durante toda la noche antes de recalentar en la sartén siguiendo los pasos anteriores. Ten en cuenta que, al descongelar, la textura cremosa de la salsa podría verse ligeramente afectada.

Aquí os dejo la receta. ¡Espero que la disfrutéis! :-)

¿Te gusta el pollo? Puedes encontrar más recetas en nuestra Página de Recetas de Pollo.

¿Te gustan los champiñones? Puedes encontrar más recetas en nuestra página de  Recetas con Champiñones.
VÍDEO DE LA RECETA, INGREDIENTES E INSTRUCCIONES PASO A PASO:
En el siguiente vídeo en alta definición puedes ver las instrucciones de la receta paso a paso con imágenes. La música de este vídeo es Royalty Free y está disponible aquí:
Winds Of Inspiration




Pechuga de Pollo con Salsa de Champiñones, Mostaza y Estragón

¿Quien dijo que comer pechuga de pollo es aburrido? Hoy os traemos una receta de pechuga de pollo deliciosa, con un sabor exquisito y muy aromática, gracias a la salsa de champiñones, mostaza y estragón fresco. Como tiene gran cantidad de salsa, podemos acompañarla de arroz blanco, o bien de pasta, y así podemos tener un plato único muy completo. El arroz o la pasta estarán riquísimas impregnadas de la salsa.

INGREDIENTES:

  • 2 pechugas de pollo
  • Sal al gusto
  • Pimienta negra al gusto
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • 225 g de champiñones en láminas finas
  • 1 chalota picada fina
  • 1 diente de ajo machacado
  • 125 ml de vino blanco
  • 125 ml de nata líquida (crema de leche)
  • 200 ml de caldo de pollo, o bien, 200 ml de agua y media pastilla de concentrado de caldo
  • 2 cucharadas de mostaza a la antigua
  • 2 cucharadas de estragón fresco picado
  • Sal y pimienta negra al gusto


INSTRUCCIONES DE LA RECETA:
  1. Limpia los champiñones y córtalos en láminas finas (puedes ver imágenes en el vídeo). Pica la chalota.
  2. Corta longitudinalmente las pechugas de pollo por la mitad, dividiendo cada una en 2 filetes del mismo grosor (puedes ver imágenes en el vídeo). Añade sal y pimienta negra recién molida a tu gusto.
  3. Calienta una cucharada de aceite de oliva en una buena sartén a fuego medio-fuerte. Cocina los filetes por tandas hasta que estén dorados por el lado que está en contacto con la sartén. El fuego tiene que ser lo suficientemente fuerte para que la carne se dore por fuera quedando muy jugosa por dentro, sin llegar a quemar demasiado la parte exterior. Dales la vuelta y cocínalos unos minutos más por el otro lado hasta que estén dorados. Resérvalos en un plato hasta que la salsa esté hecha.
  4. Para preparar la salsa, añade a la sartén otra cucharada de aceite y la chalota picada. Cocínala a fuego medio-fuerte dando vueltas continuamente durante 1 minuto.
  5. Añade el ajo machacado y cocínalo dando vueltas continuamente durante 30 segundos o 1 minuto como máximo. Ten cuidado de que el fuego no sea demasiado fuerte, ya que podría tostarse demasiado o quemarse y esto no es deseable ya que tendría un sabor amargo. Hay que cocinarlo sólo hasta que empieza a desprender olor.
  6. Añade los champiñones en láminas y cocínalos a fuego medio-fuerte dando vueltas con una cuchara frecuentemente hasta que se hayan reducido y estén marrones (puedes ver imágenes en el vídeo). Esto llevará unos 7-8 minutos.
  7. Añade el vino, la nata líquida y el caldo de pollo (o la misma cantidad de agua y 1/2 pastilla de concentrado de caldo). Llévalo a ebullición y deja que se reduzca a la mitad (unos 8-10 minutos).
  8. Añade la mostaza y el estragón picado. Mézclalo bien con la salsa
  9. Añade el pollo a la sartén, llévalo a abullición y déjalo 3-5 minutos más.
  10. Antes de servir rectifica la sal y la pimienta si lo consideras necesario.
¡Y a disfrutarlo!


2 comentarios: